Aspanoa, la asociación que atiende a los niños con cáncer de Aragón, ha reinaugurado esta mañana su piso de acogida tras haberlo reformado integralmente en los últimos meses. Este piso, que se encuentra junto al Hospital Infantil Miguel Servet de Zaragoza, centro donde reciben tratamiento todos los niños con cáncer de la Comunidad, dispone de cinco habitaciones donde pueden alojarse otras tantas familias durante la estancia hospitalaria de sus hijos.
La familia de Sofía, de Albarracín, en el piso de acogida ya reformado. Foto: Tino Gil
Este alojamiento se puso en marcha nada más fundarse la Asociación hace ahora 32 años para que las familias desplazadas tuvieran un lugar cercano donde dormir y evitar que tuvieran que alquilar una vivienda o pagarse un hotel. “En aquellos tiempos se daban circunstancias ahora impensables. Había padres con escasos recursos económicos que tenían que dormir durante meses en su coche porque no tenían a donde ir”, ha explicado el presidente de Aspanoa, Gabriel Tirado, quien ha mostrado los trabajos realizados a la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés.
Hay que recordar que todos los niños con cáncer de Aragón y la mayoría de La Rioja son tratados en el Hospital Infantil de Zaragoza. Esto hace que en este piso se alojen muchas familias riojanas, oscenses, turolenses y de municipios zaragozanos alejados de la capital.
El paso de los años y su constante uso estaba haciendo que las instalaciones se quedaran obsoletas, de manera que era necesario hacer esta reforma integral, que también ha incluido la renovación completa del mobiliario. En total, Aspanoa ha invertido aproximadamente 115.000 euros en esta obra que comenzó en el mes de marzo, tiempo durante el cual ha estado alojando a las familias desplazadas en un hostal cercano al Infantil.
Tirado ha explicado que para afrontar esta inversión ha sido fundamental la solidaridad de todos los aragoneses, especialmente a través del último partido de Aspanoa celebrado el pasado mes de noviembre con los veteranos del Real Zaragoza en La Romareda. También se ha contado con la ayuda de varias empresas y entidades. Cabe destacar los 13.000 euros de la Fundación Sesé a través de la Sesé Bike Tour que organizó en 2019 en Urrea de Gaén, 12.000 euros de la Fundación Inocente Inocente, la donación de los electrodomésticos de la cocina por parte de BSH Electrodomésticos España -a través de su marca Balay- y la colaboración de Muebles Tuco, Media Markt Grancasa y Colchones Aznar.
El año pasado, 19 familias de niños con cáncer utilizaron este piso de acogida, pasando un total de 665 noches. El alojamiento, además de las cinco habitaciones mencionadas, dispone de cocina y tres baños.